¿Qué diferencia hay entre un tarot y un oráculo?
¿Alguna vez has escuchado hablar sobre las lecturas de oráculo? ¿Te gustaría saber en qué se diferencia de un tarot? Aquí te explicaremos brevemente qué es el tarot, cuál es su estructura; y luego hablaremos de los oráculos para finalmente entender sus diferencias.
El tarot es una baraja que contiene 78 cartas. Es posible encontrar barajas de tarot de diversos temas pero siempre encontrarás los mismos arquetipos (o las mismas cartas) en cada baraja. La estructura de todo tarot es: 22 arcanos mayores + 56 arcanos menores. La palabra “arcano” hace referencia a un “misterio” y representa circunstancias y eventos privados que suceden en la vida, que pueden ser fuertes, trascendentes y externos (arcanos mayores) o cotidianos, frecuentes e internos (arcanos menores). Aquí te los explicamos.
Los arcanos mayores, en orden, son: el Loco, el Mago, la Sacerdotisa, la Emperatriz, el Emperador, el Papa, los Enamorados, el Carro, la Justicia, el Ermitaño, la Rueda de la Fortuna, la Fuerza, el Colgado, la Muerte, la Templanza, el Diablo, la Torre, la Estrella, la Luna, el Sol, el Juicio, el Mundo.
Los arcanos menores van de as al 10 en cada uno de los palos (bastos, oros, espadas y copas), y están relacionados con los cuatro elementos así:
Bastos: elemento fuego (inicios, confianza, pasión, impulso)
Oros: elemento tierra (estabilidad, compromiso, largo plazo, dinero)
Espadas: elemento aire (comunicación, pensamiento, lógica, retos)
Copas: elemento agua (emociones, recuerdos, vulnerabilidad, intuición)
Luego del 10 de cada palo, o pinta, viene “la corte”: cuatro figuras humanas que se diferencian en su grado de experticia, conocimiento y madurez en los asuntos de su pinta. Están organizados de esta forma:
Paje/sota: figura de exploración y experimentación
Caballero/caballo: figura de movimiento y determinación
Reina: figura de cuidado, protección y nutrición
Rey: figura de administración y experticia
Esta es la estructura del tarot. No importa si se trata de una baraja de tarot de cuervos, brujas o drag queens (dale click a cada uno), siempre vas a encontrar las mismas cartas. Por eso se dice que el tarot es un sistema fijo, no cambia su núcleo de significados aun cuando sí puede cambiar la representación que se hace de cada uno de los arquetipos. Es una variación estética nada más.
Ahora bien, los oráculos son barajas cuya estructura es flexible y varia de baraja a baraja. En los oráculos no hay un sistema de base, y no repite arquetipos de otro oráculo. Típicamente se construyen alrededor de un tema libre, por ejemplo, existen oráculos de cristales, de animales, hasta de fases de la luna.
El objetivo de los oráculos, más que representar situaciones propias de la experiencia humana como lo hace el tarot, es ofrecer un mensaje concreto o un consejo particular. Podemos considerar a los oráculos como barajas de «mensajes», finalmente a eso se refiere la palabra “oráculo”.
¿Cuál es mejor?
¿El tarot o un oráculo? Realmente cada tipo de sistema tiene sus ventajas, pero creemos que se complementan armoniosamente. El tarot apareció en el mundo hace un par de siglos y las circunstancias en las cuales fue diseñado han cambiado un poco, entonces los oráculos no solo complementan sino actualizan el mensaje que puede traer el tarot. Por otra parte, los oráculos son independientes unos de otros y funcionan bajo sus propias “reglas”, así que puede ser necesario el tener que estudiar individualmente el modo de operar de cada baraja, mientras que en el caso del tarot no tienes que hacerlo porque si entiendes la dinámica de la baraja, podrás leer cualquier baraja de tarot.
Realmente no tenemos que escoger entre uno u otro sistema, es posible trabajar con ambos al mismo tiempo o sólo con uno de ellos. Cada cartomante desarrolla su estilo propio y se conecta con las cartas de una forma singular.
Sin embargo, es muy curioso ver que aun cuando se trate de barajas aparte, normalmente dan un mensaje conjunto y sincrónico. Es más la regla que la excepción el ver que aquello que te dice el tarot muy probablemente lo afirmará también el oráculo. Decir que uno es mejor que otro puede ser lo mismo a debatir sobre qué fruta es mejor: la pera o la manzana. Tendrás personas que escojan las peras y personas que escojan las manzanas.
Con nuestras reflexiones de hoy podemos concluir que: un tarot es un sistema fijo, compuesto por las mismas 78 cartas independientemente de su temática; y un oráculo es un sistema flexible, de mensajes compuestos alrededor de un tema, cuyas reglas pueden variar entre barajas, y puede integrar el mensaje del tarot. Si la lectura de cartas aún te genera reservas, te invitamos a leer este artículo, y si planeas hacerte una lectura pronto te recomendamos este. Esperamos que este artículo te haya sido de utilidad y si te interesa una lectura de tarot, oráculos o ambos, mándanos un mensaje directo en Instagram. Te esperamos.
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